Días más tarde, los medios de comunicación comenzaron a publicar noticias de supuestos impagos de salario a los jugadores del club ofreciéndoles pagarés, lo que aumentó el descontento con la plantilla a varias semanas de comenzar la temporada. Su sucesor en el cargo sería el vicepresidente Pedro Cortés, que ya lo fue brevemente en 1986, y el nuevo vicepresidente sería Jaime Ortí, que también optaba a la presidencia.