Todo esto, con las icónicas puntas de flecha de Hummel en los hombros (que junto a un estilizado abejorro son los logos de la firma). Es lo que tiene dar las cosas por hecho, y llevar todo preparado para la victoria. Interesante historia. No sabía que el uniforme de Brasil que todos conocemos y que se ha hecho mundialmente famoso había surgido de un concurso público.